Cuando me recuerdan a mi padre, hace que valga la pena el esfuerzo por estar aquí, dice
Corto una oreja a cada uno de sus toros; igual que Capea y el Zapata falló con la espada
Contento, alegre, compartiendo unos minutos con algunas admiradores quienes se acercaron a solicitarle foto más que nada, estaba Gastón Santos hijo, casi al final de la corrida del martes pasado martes en La Petatera de Villa de Alvarez, en la cual es “un orgullo ser invitado”, dijo.
Plaza esta, agregó, que es muy bonita, única en el mundo, por su arquitectura y que me trae muchos recuerdos, porque ya he estado en otras ocasiones, pero “cada que me invitan, vengo con mucho gusto”, además, “mi papá tuvo muchos triunfos aquí”, puntualizó.
Comentó que aquí se acerca mucha gente y me dice que vio torear en esta particular plaza a mi papá. “El que me lo recuerden, hacen que valga la pena esta profesión, todo el esfuerzo y trabajo que se hace para ser torero, rejorneador en mi caso. Y ojalá, ya que tenga un hijo, también le digan que recuerdan a su papá”.
Gastón Santos cortó dos orejas, una de cada uno de sus astados, compartiendo honores con Pedro Gutiérrez Lorenzo “El Capea” (también cortó dos apéndices) y Uriel Moreno “El Zapata”, sin fortuna con el acero.
Muy accesible estuvo Gastón Santos, con quien se le acercaba a pedirle el autógrafo o la foto, además de intercambiar comentarios.
El potosino, que cortó una oreja de cada uno de los toros que le tocó rejornear, comentó que aquí en La Petatera el ruedo es muy grande, obligando esto a “dejar el toro más crudo y además no está uno tan pegado al público, por lo que siento que si está uno de u lado, ese sector del público si puede sentir lo que hace uno, pero no la otra parte del público, ni el juez”.
Y esto, porque sintió que en su segundo astado merecía un trofeo más, pero, añadió, “no me gusta polemizar, respeto las decisiones del juez, pero si sentí que estuvo duro”.
Se despidió señalando que a esta Petatera asiste un gran público, con mucha pasión y que “cada vez que me inviten, con mucho gusto por aquí estaremos”.
LA NOTA DEL COLEGA PANCHO MANZO, DICE…
Tarde de 4 orejas y apéndices en La Petatera
En la primera corrida de feria de los Festejos Charrotaurinos de Villa de Alvarez, se cortan 4 orejas, el rejoneador Gastón Santos y el torero Pedro Gutiérrez Lorenzo “El Capea” fueron los encargados de cortarle un apéndice a sus respectivos enemigos, en la Monumental “Petatera”, que registró una entrada regular de aficionados a la tauromaquia, fue una tarde donde hasta las edecanes recibieron aviso por parte del juez de plaza; regulares resultaron los 6 de la ganadería de Medina Ibarra, la cuarta oreja de la tarde el juez Fermín Fernández Ahumada la otorgó sin que el público la solicitara, las otras tres fueron exigidas por la afición que se dio cita a los tendidos de la Petatera.
El rejoneador Gastón Santos, emocionó a los aficionados a la tauromaquia al hacer unos giros en su montura un tordillo, toreó a la grupa y en sus dos astados de nombre Sol de 480 kilos y Presidente de 500 kilos de peso, a ambos les cortó una oreja; cabe mencionar que su primera faena se la brindó al mandatario estatal, Jesús Silverio Cabazos Cevallos; en las faenas de éste intervinieron los Forcados de San Luis Potosí, quienes en su primera intervención no tuvieron mucha suerte y uno de sus elementos salió golpeado y tuvo que recibir sutura de 3 centímetros del rostro, en su segunda aparición, en el cuarto de la tarde hicieron una estupenda pega que fue aplaudida por el respetable.
Tablajero, fue el primero en suerte para “El Capea”, a este toro le hizo falta torero ya que tenía para sacarle una faena de mucha calidad, pero al torero le hicieron falta tablas y rápido lo mandó al destazadero, no sin antes darle una buena tanda de derechazos, y algunos pases por naturales, con los que nunca se acopló ya que no le dio la pausa y el tiempo suficiente para que el astado pasara, los pases por derecha siempre los coronó con el pase de pecho, además de ganarse el aplauso del respetable con algunos desplantes, al tirarse a matar deja una estocada un poco caída pero en buen sitio que sirvió para que el toro doblara lo que le dio su primer oreja, aunque la afición le exigía al juez de plaza que le entregara los dos apéndices, éste pudo ser el mejor toro de la tarde pero al torero le falto oficio para disfrutar su faena y coronarse como el triunfador de la corrida.
Para su segundo y último de la tarde de nombre Volcán de 479 kilos, el “Capea” toreó de pitón a pitón, nunca buscó lidiar por naturales, aunque sí ligó algunas tandas de derechazos de nuevo recurrió a los desplantes y se ganó el aplauso, aunque se vio más voluntarioso con el capote y muleta y al matar dejó una estocada un poco trasera y caída pero fulminante que mando a Volcán al destazadero, y el juez no dudó en entregarle la segunda oreja.
Uriel Moreno “El Zapata” que salió con terno azul y oro, fue el encargado de abrir la lidia ordinaria, pero no tuvo suerte en ninguno de sus dos astados pese a que estuvo voluntarioso con copote y muleta, pero a la hora de entrar a matar falló y ahí perdió lo ganado con copote y muleta, a él le correspondieron en suerte Petatero, un negro frontino nevado de los cuartos traseros, a este le dio varias tantas de derechazos de buena hechura, aunque en ocasiones le bajó mucho la muleta y el toro dobló los remos delanteros, en su primer intento a la hora de matar dio un pinchazo, pero en su segunda oportunidad metió la espada hasta la empuñadura.
En su segundo de la tarde y 5 de la lidia de nombre Porrillas, realizó tanda de derechazos, intentó por naturales pero el toro no le respondió, cabe mencionar que a sus dos toros los banderilleó y emocionó al respetable ya que siempre el último par lo intentó al sesgo, pero de nueva cuenta falla a la hora de tirarse a matar y tuvo que recurrir al descabelle, incluso, recibió avisos del juez de plaza Fermín Fernández Ahumada, y el asesor taurino Vicente Carrillo.
Corto una oreja a cada uno de sus toros; igual que Capea y el Zapata falló con la espada
Contento, alegre, compartiendo unos minutos con algunas admiradores quienes se acercaron a solicitarle foto más que nada, estaba Gastón Santos hijo, casi al final de la corrida del martes pasado martes en La Petatera de Villa de Alvarez, en la cual es “un orgullo ser invitado”, dijo.
Plaza esta, agregó, que es muy bonita, única en el mundo, por su arquitectura y que me trae muchos recuerdos, porque ya he estado en otras ocasiones, pero “cada que me invitan, vengo con mucho gusto”, además, “mi papá tuvo muchos triunfos aquí”, puntualizó.
Comentó que aquí se acerca mucha gente y me dice que vio torear en esta particular plaza a mi papá. “El que me lo recuerden, hacen que valga la pena esta profesión, todo el esfuerzo y trabajo que se hace para ser torero, rejorneador en mi caso. Y ojalá, ya que tenga un hijo, también le digan que recuerdan a su papá”.
Gastón Santos cortó dos orejas, una de cada uno de sus astados, compartiendo honores con Pedro Gutiérrez Lorenzo “El Capea” (también cortó dos apéndices) y Uriel Moreno “El Zapata”, sin fortuna con el acero.
Muy accesible estuvo Gastón Santos, con quien se le acercaba a pedirle el autógrafo o la foto, además de intercambiar comentarios.
El potosino, que cortó una oreja de cada uno de los toros que le tocó rejornear, comentó que aquí en La Petatera el ruedo es muy grande, obligando esto a “dejar el toro más crudo y además no está uno tan pegado al público, por lo que siento que si está uno de u lado, ese sector del público si puede sentir lo que hace uno, pero no la otra parte del público, ni el juez”.
Y esto, porque sintió que en su segundo astado merecía un trofeo más, pero, añadió, “no me gusta polemizar, respeto las decisiones del juez, pero si sentí que estuvo duro”.
Se despidió señalando que a esta Petatera asiste un gran público, con mucha pasión y que “cada vez que me inviten, con mucho gusto por aquí estaremos”.
LA NOTA DEL COLEGA PANCHO MANZO, DICE…
Tarde de 4 orejas y apéndices en La Petatera
En la primera corrida de feria de los Festejos Charrotaurinos de Villa de Alvarez, se cortan 4 orejas, el rejoneador Gastón Santos y el torero Pedro Gutiérrez Lorenzo “El Capea” fueron los encargados de cortarle un apéndice a sus respectivos enemigos, en la Monumental “Petatera”, que registró una entrada regular de aficionados a la tauromaquia, fue una tarde donde hasta las edecanes recibieron aviso por parte del juez de plaza; regulares resultaron los 6 de la ganadería de Medina Ibarra, la cuarta oreja de la tarde el juez Fermín Fernández Ahumada la otorgó sin que el público la solicitara, las otras tres fueron exigidas por la afición que se dio cita a los tendidos de la Petatera.
El rejoneador Gastón Santos, emocionó a los aficionados a la tauromaquia al hacer unos giros en su montura un tordillo, toreó a la grupa y en sus dos astados de nombre Sol de 480 kilos y Presidente de 500 kilos de peso, a ambos les cortó una oreja; cabe mencionar que su primera faena se la brindó al mandatario estatal, Jesús Silverio Cabazos Cevallos; en las faenas de éste intervinieron los Forcados de San Luis Potosí, quienes en su primera intervención no tuvieron mucha suerte y uno de sus elementos salió golpeado y tuvo que recibir sutura de 3 centímetros del rostro, en su segunda aparición, en el cuarto de la tarde hicieron una estupenda pega que fue aplaudida por el respetable.
Tablajero, fue el primero en suerte para “El Capea”, a este toro le hizo falta torero ya que tenía para sacarle una faena de mucha calidad, pero al torero le hicieron falta tablas y rápido lo mandó al destazadero, no sin antes darle una buena tanda de derechazos, y algunos pases por naturales, con los que nunca se acopló ya que no le dio la pausa y el tiempo suficiente para que el astado pasara, los pases por derecha siempre los coronó con el pase de pecho, además de ganarse el aplauso del respetable con algunos desplantes, al tirarse a matar deja una estocada un poco caída pero en buen sitio que sirvió para que el toro doblara lo que le dio su primer oreja, aunque la afición le exigía al juez de plaza que le entregara los dos apéndices, éste pudo ser el mejor toro de la tarde pero al torero le falto oficio para disfrutar su faena y coronarse como el triunfador de la corrida.
Para su segundo y último de la tarde de nombre Volcán de 479 kilos, el “Capea” toreó de pitón a pitón, nunca buscó lidiar por naturales, aunque sí ligó algunas tandas de derechazos de nuevo recurrió a los desplantes y se ganó el aplauso, aunque se vio más voluntarioso con el capote y muleta y al matar dejó una estocada un poco trasera y caída pero fulminante que mando a Volcán al destazadero, y el juez no dudó en entregarle la segunda oreja.
Uriel Moreno “El Zapata” que salió con terno azul y oro, fue el encargado de abrir la lidia ordinaria, pero no tuvo suerte en ninguno de sus dos astados pese a que estuvo voluntarioso con copote y muleta, pero a la hora de entrar a matar falló y ahí perdió lo ganado con copote y muleta, a él le correspondieron en suerte Petatero, un negro frontino nevado de los cuartos traseros, a este le dio varias tantas de derechazos de buena hechura, aunque en ocasiones le bajó mucho la muleta y el toro dobló los remos delanteros, en su primer intento a la hora de matar dio un pinchazo, pero en su segunda oportunidad metió la espada hasta la empuñadura.
En su segundo de la tarde y 5 de la lidia de nombre Porrillas, realizó tanda de derechazos, intentó por naturales pero el toro no le respondió, cabe mencionar que a sus dos toros los banderilleó y emocionó al respetable ya que siempre el último par lo intentó al sesgo, pero de nueva cuenta falla a la hora de tirarse a matar y tuvo que recurrir al descabelle, incluso, recibió avisos del juez de plaza Fermín Fernández Ahumada, y el asesor taurino Vicente Carrillo.
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