*El
colombiano Juan Manuel Noreña tuvo que ser trasladado a la clínica por una
conmoción cerebral.
*
Los picadores Juan Carlos Martínez y Guillermo Cobos ovacionados por su labor.
Tauro
Media
Aguascalientes,
Ags.- En una tarde calurosa y con casi tres cuartos de entrada en la centenaria
Plaza de Toros San Marcos se desarrolló el octavo festejo de la temporada novilleril
2013, el cual se anunció como de selección y en donde ninguno de los coletas
logró tocar pelo, sin embargo se pudieron ver cosas muy interesantes en algunos
de ellos, mientras que el ganado de Espíritu Santo fue parejo en presentación y
desigual en juego, sobresaliendo segundo y sexto que fueron aplaudidos en el
arrastre.
Como
primer espada salió el aguascalentense Jorge Didier, quien tenía alrededor de
dos años sin calzarse el traje de luces, lo que no fue mella para mostrar su entrega, arrojo y voluntad ante un
novillo que salía suelto y poco se prestaba para el lucimiento, el novillero
tuvo destacados momentos con la muleta en la diestra con lo que escuchó fuertes
olés, además del valor a toda prueba delante de los pitones, finalizó su trasteo
con manoletinas, en donde fue prendido y echado por los aires, sin
consecuencias, y con la espada se puso pesado, pinchando hasta en seis
ocasiones, escucho un aviso y aun así la gente le ovacionó desde el tercio.
El
segundo de la tarde correspondió al venezolano Tomás Martínez, quien desde
inicio manifestó que deseaba el triunfo grande, se fue a porta gayola y de
espaldas a los toriles citó de salida al novillo para darle una tafallera que
fue bien recibida por el público, luego vinieron verónicas y un quite por
gaoneras, luego de haber sido picado el novillo por Juan Carlos “El Pollo”
Martínez, quien recibió palmas de la afición. Martínez con muleta inicio de
rodillas dando muletazos por alto y de pie corrió de buena manera la mano,
primero por derecha y luego al natural, mostrando sitio y quehacer, conectó con
la gente y más aun cuando alargaba los
muletazos con dimensión torera, culminó con manoletinas y el gozo se
desvaneció con el acero, ya que no encontró los blandos y en el cuarto intento
coclocó tres cuartas partes del estoque, para finiquitar con descabello, Saludo
en el tercio tras haber escuchado un aviso y de haber sido arrastrados los
restos del ejemplar de Espíritu Santo que recibió palmas desde el tendido.
El
tlaxcalteca José María Macías siguió en orden, con capa lanceó a la verónica y
quitó con ceñidas gaoneras, con la muleta poco pudo realizar, a pesar de su
voluntad e insistencia, pues las condiciones del animal no ofrecieron mucho,
rajado y dando arriones, aun así entendió que había que realizar una labor de
aliño y con doblones muy toreros logró momentos muy lucidos en su presentación,
con la espada cuatro pinchazos y una estocada delantera son el resumen de su
labor que fue silenciada por el respetable.
El
cuarto de la tarde fue para el colombiano Juan Manuel Noreña, quien inició con
dos largas afaroladas en la zona de tablas, luego jugó los brazos con el capote
y remató con media de buena manufactura, se mostró persistente en su deseo
frente a un animal que no ofrecía más que un peligro sordo, extrajo algunos
derechazos de gran mérito y al tirarse a matar fue prendido por el novillo y
llevado a la enfermería en donde los médicos de plaza le revisaron y enviaron a
la clínica para una valoración mayor, pues resultó con una conmoción cerebral y
un esguince cervical. El burel fue despachado por el primer espada, Jorge
Didier.
El
tlaxcalteca José Nava salió como quinto en el festejo y cayó de pie con la
afición hidrocálida, pues conectó desde el principio, en varas fue aplaudido
Guillermo Cobos, luego vino un quite por chicuelinas y con las banderillas el
propio coleta brindó a los presentes mostrándose animoso en la realización del
tercio, ya con la muleta corrió la mano por ambos lados, destacando lo hecho
con la derecha, la gente pudo ver a un joven verde pero actitud y carisma,
realizó manoletinas para concluir el trasteo y con la espada, al igual que sus
compañeros de cartel no logró redondear lo hecho en el ruedo, dos pinchazos y
una estocada caída le sirvieron para recibir las palmas en el tercio, mientras
que el novillo fue aplaudido en el arrastre.
Finalmente
Ricardo Rocha, de Ciudad Juárez, se presentó con el público de Aguascalientes
quien le apoyó en todo instante, luego de ver a un joven con pocos recursos y
mucho corazón, se plantó en los medios para recibir con farol de rodillas y
luego lancear a la verónica y quitar con chicuelinas, con muleta no encontró
las distancias, ni los tiempos, fue revolcado en tes ocasiones y la confianza
le fue mermando cada vez más. Una estocada caída, dos pinchazos y otros tres
cuartos de acero fueron la ración para concluir con su comparecencia.
El
próximo domingo se llevará a cabo la última de la temporada con un cartel por
definir entre lunes y martes de esta semana, así se tendrá la antesala de la
Feria Nacional de San Marcos y con ello el plato fuerte que Aguascalientes
tiene cada año para los aficionados taurinos del continente americano.
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